Después del asesinato de Daniel Capristo, el chofer de Valetín Alsina que fue asesinado por un chico de 14 años, conversamos con la jueza Marta Pascual, de Lomas de Zamora. Pascual nos habló del dilema de los jueces que, como ella, se ocupan cada día de los menores en conflicto con la ley. Nos describió las dificultades para conseguir vacantes en los institutos de menores, de la precariedad de muchos de ellos, de las fugas inevitables ante la falta de personal de seguridad, de la imposibilidad de responder a las demandas de una sociedad que cree que entran por una puerta y salen por la otra sin que a los jueces se les mueva un pelo, y de la impotencia por el futuro de esos chicos sin suerte ni destino. Un testimonio desde la trinchera.
16 de abril de 2009
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No entiendo tanto problema, como no pueden manejar 15 menores homicidas, son 15 nada mas, o no? A lo demas que los dejen libres y a estos 15 que los pongan en la casa de Safaroni y de Argibay y resuelto el problema.
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